EL ESFUERZO DE TXOMIN ORONOZ PARA GANAR EL CAMPEONATO
Finalizado el Campeonato, la grabación del pulsómetro nos permite valorar el esfuerzo realizado en cada vuelta, en cada cuesta y en cada escapada, como la que dió el triunfo a Txomin Oronoz en Master 50.
Esta es la imagen del entreno donde se busca esa potencia mantenida sobre los 280 w. Se produce una ligera deriva cardiaca con el paso de los kilómetros que será menor cuanto mayor sea la forma física del corredor
Esta es la imagen de la competición con 398 w de potencia media en la última subida. Se ha subido progresivamente mejor durante la competición. Ese es el objetivo.
Hasta ahora se prefería hacer una imitación de la carrera una semana previa, y se introducían todas las variables de la carrera: cambios de ritmo, ataques mantenidos, subidas al máximo, descansos en bajadas, persecuciones, escapadas etc.
Pues bien la recuperación de todas estas agresiones es fácil para un corredor superclase pero para un deportista «normal» puede ser difícil de conseguir en una semana. Te has metido en fatiga de forma incotrolada y ya no hay tiempo para recuperar y has estropeado el campeonato. Incluso, se suele dar la paradoja de que corredores que lo hacen de forma excelente en este entreno, y que reciben las alabanzas de sus compañeros de grupeta, fracasen después en el campeonato por dolor de patas, o por fatiga general, «o porque he tenido un mal día»
El sistema expuesto supone tener un 3% de falta de pedaleo durante el entreno frente a un 15% habitual de dejar de pedalear en una salida en grupeto típica. Eso es difícil y suele implicar el hacer el entreno en solitario ya que cada uno debería ir su propia potencia.
Analizando el esfuerzo realizado por el grupo en los últimos 16 km, que es el esfuerzo de la escapada de Txomin Oronoz, nos da una potencia normalizada de 295 w con una velocidad de 37,64 km/h lo que en mi caso dió una frecuencia cardiaca de 142/min.
Pues bien, Txomin realizó en solitario esta distancia en un minuto menos, por lo que rodó durante los 16 km con una ascensión de 88 metros a una media de 39,18 km/h, es decir la misma con la que habíamos cubierto la primera vuelta, por lo que su potencia media normalizada fue de 307 w y habrá supuesto un incremento de 20 pulsaciones medias. Un trabajo descomunal si se tiene encuenta de que son los últimos 25 minutos de una carrera de 94 min. Es decir que se ha tirado solo y a tope el 26% de la prueba. Zorionak berriro!