El Triatlón desde dentro
Hoy tenemos un articulista invitado: Marcial.
Marcial es un triatleta que nos cuenta cómo se vive la primera participación en una competición como esta. El relato engancha desde el primer momento, desde la primera línea. Espero que os guste tanto como a mi.
Triatlon Sprint de Donostia – San Sebastián
Mi primer triatlón, 1 hora 27 minutos. Conseguidos mis dos objetivos para el primer triatlón: 1º acabarlo y 2º hacerlo en menos de hora y media.
7:45. Llego a Donostia, hace un día inmejorable para la práctica de cualquier deporte, ligeramente nublado y alrededor de 17 grados celsius al empezar la prueba. Recojo el dorsal, numerito para el cinturón, el casco, la bici y el guardarropa, el 368, no es que sea un número especialmente bonito, pero es el mío.
8:30. Pasamos el control del material de los jueces y entramos a boxes. Lo primero que me llama la atención es el reducidisimo espacio del que dispones para dejar tus cosas, pero tampoco hay que dejar tantas así que no pasa nada. Después el grandísimo compañerismo que hay entre la gente, creo que pedía ayuda a dos o tres participantes y todos me ayudaron gustosos.
9:30. Pertrechado ya de mi ropa y bien ordenado todo en mi box decido ir acercándome a la línea de salida y meterme en el agua para ir probándola. Casualidades de la vida en la linea de salida me encuentro a un compañero de trabajo, que además estuvo conmigo en el euskaltegi, es su primer triatlón estamos los dos un poco acojonadillos, aunque el lleva ventaja porque ha hecho ya unos cuantos duatlones.
10:00. Salida de las chicas, me intereso por ver como toman la primer boya, sin problemas. Miro mi pulsómetro 140 ppm ¡Dios mío! si ni siquiera me estoy moviendo, ¿Tan nervioso estoy?
10:10. Nos mandan colocarnos para dar la salida, me coloco por la parte de atrás, no quiero ni que me pasen por encima ni que me pateen ni que me suelten un tortazo nadando.
Suena la bocina y entramos al agua, me pongo a nadar extremando las precauciones para que de un manotazo no me salten las gafas… primera boya, menuda melé… la pasamos bien, segunda boya ahora el “pelotón” está mas estirado y no hay problemas. Enfilamos el tramo final hacia la playa de nuevo, ya con más confianza, con el ritmo que quería tener desde el principio y… zas!!!! manotazo que me llevo y las gafas fueras de su sitio. Menos mal que las llevaba por debajo del gorro, sino, las habría perdido. Me las recoloco y termino la natación. Entre el estrés y las ganas de llegar a boxes apenas noto el mareo propio al salir del agua. Miro el pulsómetro, sólo logro ver 18 minutos, no está mal para ser el primero (al final fueron 19 min 19 seg, el llegar hasta el control).
Rápidamente me quito todo de encima y cojo casco, gafas, dorsal y me pongo las zapatillas, salgo de boxes, monto en la bicicleta y me pongo a pedalear. Estoy cansado, miro el pulsómetro 172 ppm… buff!!! tengo que relajarme, pero las ganas de hacerlo bien me superan y sigo a ése ritmo. Durante la carrera en bicicleta no encuentro un grupo de mi ritmo hasta el Km 15 por lo que tengo que hacer la mayor parte del recorrido sólo, luego me pasará factura.
Llego a boxes de nuevo, 20 Km en 40 min, una media de 31Km/h más o menos, no está mal.
Dejo la bici y el casco, me cambio las zapatillas, giro el dorsal y me pongo a correr, las piernas no responden, estoy corriendo por inercia. Como he dicho antes la bici me pasa factura en la carrera a pie. Una distancia en la que puedo ir perfectamente a 4 minutos por Km la estoy haciendo a más de 5 minutos el Km. Llego al Km 3, parece que mis piernas resucitan y aumento el ritmo, pero no es más que un espejismo pasajero y vuelven a decaer.
Al final llego a meta, la carrera pedestre hace que mi tiempo suba mucho, me salen mas o menos 28 minutos los 5 Km lo que es ir a 5:30 el kilométro, demasiado….
Bueno hemos acabado el primer triatlón por lo que estamos contentos.
Datos
1h 28min
F.C. Max: 183 ppm (mas o menos el 93%)
F.C. Med: 159 ppm (un buen ejercicio sin duda)
Calorias consumidas: 1140 Kcal.