La aventura china I
Todo tiene un principio, y todo llega, como ha ocurrido con la expedición de la Selección Nacional de Pista en su cuarta participación en la Copa del Mundo. Y todo empieza por donde siempre: POR EL AEROPUERTO.
Esta miniatura la encontramos en el aeropuerto de Ámsterdam. Tuvimos tiempo durante la espera a nuestra conexión con Pekín, de poder ver cosas curiosas como ésta…
O estos tiparracos gigantes sentados.
O este protector contra golpes para el teléfono móvil que nos dedicó el “ingenio” del seleccionador. En fin que 4 horas dan para mucho.
Por fin llegamos a Beijing, tras una noche terrible en el avión más espachurrados que sardinas en lata. Los policías muy amables, y hasta tenían unos botones que te pedían que pulsases, una vez concluidos los trámites de la documentación, para que les valorases su trabajo. Ya sabéis, varios botones con caras desde muy sonrientes a muy enfadados. ¡Alucina! Yo calificando al poli!. Claro, le di un 10.
Gente a patadas en el aeropuerto.
¡El detalle de los chinos para que recoger la maleta no se te haga tan pesado!.
Y para redondear la guinda, nos felicitan el nuevo año que comienza en Febrero.